Los desafíos estratégicos de los servicios financieros
por Angel Cano
Este post es una respuesta al artículo de Pankaj Ghemawat» Encontrar su estrategia en el nuevo panorama“
En su artículo» Encontrar su estrategia en el nuevo panorama «, Pankaj Ghemawat nos ofrece un marco excelente para abordar los principales desafíos estratégicos del futuro. Permítame explicar algunos de sus puntos de vista desde el punto de vista financiero.
Empezamos a observar señales de una recuperación en la economía. Tarde o temprano, la crisis llegará a su fin. Pero el fin de la crisis no necesariamente traerá calma. El sector financiero se enfrentará un nuevo y exigente mapa competitivo, lo que inevitablemente implicará cambios y ajustes profundos. Los actores que hayan sobrevivido a la crisis descubrirán que su existencia seguirá siendo amenazada si no abordan el desafío del cambio.
Puede entenderse que el nuevo marco competitivo refleja tres tendencias presentes y futuras: normas reguladoras y de supervisión más estrictas, el proceso de desapalancamiento y los cambios en la sociedad y en los patrones de relación.
En primer lugar, normas reguladoras y de supervisión más estrictas se materializará en un aumento de los requisitos de capital, liquidez y aprovisionamiento y en una protección al consumidor más estricta. La principal consecuencia será una mayor presión sobre la rentabilidad de los bancos, lo que los obligará a ser más selectivos a la hora de asignar los recursos escasos, en particular, el capital, que escaseará cada vez más.
Para hacer frente a este desafío, será necesario desarrollar modelos avanzados de gestión y asignación del capital ajustada al riesgo en cada área geográfica, cada unidad de negocio, cada producto y segmento. Esta es la única manera de gestionar dinámicamente cada cartera y condicionará la forma en que los bancos se diversifiquen y crezcan a nivel mundial. Pero todo esto debe hacerse con la creación de valor como principal punto de referencia.
En segundo lugar, mencioné el proceso de desapalancamiento. Un menor crecimiento del crédito afectará directamente a los balances de los bancos y el tipo de apalancamiento que era común en el pasado ya no será factible.
A medida que se vayan imponiendo normas reguladoras y de supervisión más estrictas y se vaya reduciendo el apalancamiento, los bancos que deseen compensar la mayor presión sobre la rentabilidad tendrán que maximizar sus relaciones con cada cliente para obtener de ellos un valor óptimo. Para ello, debemos sustituir las soluciones habituales por enfoques nuevos y fundamentalmente diferentes.
Por último, cambios en la sociedad y los patrones de relación. Los cambios profundos en las preferencias de los consumidores determinarán la forma en que los bancos contactan con sus clientes y se relacionan con ellos. Esto implicará evolucionar hacia un modelo de distribución más eficiente y productivo.
La tecnología desempeñará un papel fundamental a la hora de adaptarse a estos cambios. La tecnología debe considerarse la gran facilitadora, la manera de abrir el espacio de relación con el cliente, navegando sin problemas entre el contacto físico y el virtual. Las empresas de éxito ofrecerán un trato superior, con servicios adaptados a cada tipo de cliente y a sus necesidades específicas.
Los modelos ganadores en el nuevo escenario que ya está empezando a surgir se basarán en una excelente comprensión del riesgo y en una asignación del capital centrada. Los bancos ganadores serán aquellos que sean capaces de saturar sus relaciones con los clientes con propuestas superiores e innovadoras que añadan un valor real. Y, por último, serán los bancos los que desarrollen modelos de distribución avanzados y eficientes que extraigan el máximo valor de los avances tecnológicos.
Ángel Cano es el presidente y COO de la Grupo BBVA, uno de los principales grupos europeos de servicios financieros
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