PathMBA Vault

Planificación estratégica

Conceptos básicos de estrategia que ignora por su cuenta y riesgo

por Joan Magretta

Michael Porter, la principal autoridad mundial en competencia y estrategia, es a veces víctima de su propio éxito. Usamos su terminología todos los días: ventaja competitiva, cadena de valor, diferenciación, creación de valor. Por lo tanto, creemos que «conocemos» su obra. Pero, de hecho, la mayoría de los directivos no lo hacen. Ellos dicen lo que dicen, pero han convertido sus poderosas ideas en palabras de moda empresarial. La ventaja competitiva, por ejemplo, se utiliza a menudo para referirse a «cualquier cosa en la que creamos que somos buenos». Cualquier plan o programa se denomina estrategia. Los gerentes confunden la diferenciación con ser diferente.

Eso es más que una pena. He tenido la rara oportunidad de ver a Porter con ojos nuevos, rara porque cuando me acerqué a él hace algún tiempo con la idea de escribir una guía concisa y orientada a la práctica sobre su trabajo en materia de competencia y estrategia, accedió a darme acceso total a su obra más actual, así como a los clásicos originales. Mi premisa por escrito Entendiendo a Michael Porter fue muy simple: una visión estratégica clara es esencial para cualquier gerente en cualquier entorno, y el trabajo de Porter establece los principios y marcos básicos que debe dominar.

Mi objetivo era presentar el Porter esencial de una forma que pudiera digerirse y ponerse a trabajar más fácilmente que el original. Después de haber trabajado directamente con Porter durante casi dos décadas y haber aplicado sus ideas durante mis años como consultor de estrategia, fui lo suficientemente arrogante como para creer que no iba a aprender nada nuevo. Incorrecto. Cuando junta todo ese trabajo, cuando integra lo nuevo con lo antiguo, aprovecha una rica veta de ideas prácticas y, a menudo, sorprendentes. Una de las más importantes es que la mayoría de las empresas piensan que tienen una estrategia cuando no la tienen.

Así que mientras trabajaba en este libro, llevé una lista de esas ideas. Aquí está.

  1. La ventaja competitiva no consiste en superar a los rivales, sino en crear un valor único para los clientes. Si tiene una ventaja competitiva, aparecerá en sus pérdidas y pérdidas.
  2. Ninguna estrategia tiene sentido a menos que deje claro lo que la organización no va a hacer. Hacer concesiones es el eje que hace que la ventaja competitiva sea posible y sostenible.
  3. No hay honor en el tamaño o el crecimiento si no tienen beneficios. La competencia tiene que ver con los beneficios, no con la cuota de mercado.
  4. No sobreestime ni subestime la importancia de una buena ejecución. Es poco probable que sea una fuente de ventaja sostenible, pero sin ella ni siquiera la estrategia más brillante no logrará producir un rendimiento superior.
  5. Las buenas estrategias dependen de muchas opciones, no de una, y de las conexiones entre ellas. Una competencia básica por sí sola rara vez generará una ventaja competitiva sostenible.
  6. La flexibilidad ante la incertidumbre puede parecer una buena idea, pero significa que su organización nunca defenderá nada ni será buena en nada. Demasiados cambios pueden ser tan desastrosos para la estrategia como muy pocos.
  7. Comprometerse con una estrategia no requiere predicciones heroicas sobre el futuro. De hecho, asumir ese compromiso mejora su capacidad de innovar y adaptarse a las turbulencias.
  8. Competir por ser el mejor es un enfoque intuitivo pero autodestructivo de la competencia.
  9. Una propuesta de valor distintiva es esencial para la estrategia. Pero la estrategia va más allá del marketing. Si su propuesta de valor no requiere una cadena de valor diseñada específicamente para ofrecerla, no tendrá relevancia estratégica.
  10. No crea que tiene que «deleitar» a todos los clientes posibles que hay. La señal de una buena estrategia es que hace que algunos clientes estén descontentos deliberadamente.

¿Le parecen evidentes cuando se detiene a pensar en ellos? ¿O le parece, como a mí, que van en contra de la forma en que piensan y se comportan la mayoría de los directivos? Por eso yo diría que la obra de Porter, si bien nunca estuvo de moda, nunca ha sido tan oportuna para tanta gente que trabaja en el sector público y privado como lo está hoy en día. En medio de la enorme agitación económica en muchos sectores y países de todo el mundo, la propia estrategia ha sido objeto de críticas. Los fundamentos de Porter lo mantienen con los pies en la tierra. Explican no solo cómo las empresas mantienen sus ventajas competitivas durante décadas, sino también por qué la estrategia es aún más importante —no menos— en tiempos turbulentos e inciertos.

Artículos Relacionados

Investigación: La IA generativa hace que la gente sea más productiva y esté menos motivada

Investigación: La IA generativa hace que la gente sea más productiva y esté menos motivada

Arreglar los chatbots requiere psicología, no tecnología

Arreglar los chatbots requiere psicología, no tecnología

Los chatbots dotados de IA se están convirtiendo en el nuevo estándar para la gestión de consultas, reclamaciones y devoluciones de productos, pero los clientes se alejan de las interacciones con los chatbots sintiéndose decepcionados. La mayoría de las empresas intentan solucionar este problema diseñando mejores modelos de IA en sus chatbots, pensando que si los modelos suenan lo suficientemente humanos, el problema acabará desapareciendo. Pero esta suposición es errónea. Esto se debe a que el problema de fondo no es tecnológico. Es psicológico: Hay que engatusar a la gente para que vea a los chatbots como un medio positivo de interacción. Los autores han analizado recientemente las últimas investigaciones sobre chatbots e interacciones IA-humanos, y en este artículo presentan seis acciones probadas que puede llevar a cabo al desplegar su chatbot de IA para impulsar la satisfacción, la percepción positiva de la marca y las ventas.

Investigación: ¿Está penalizando a sus mejores empleados por desconectar?

Investigación: ¿Está penalizando a sus mejores empleados por desconectar?

Para combatir el creciente desgaste del personal, muchas empresas han defendido programas de bienestar y han fomentado un enfoque renovado en el equilibrio entre la vida laboral y personal. Pero un nuevo estudio descubrió que incluso cuando los líderes reconocían que desvincularse del trabajo aumenta el bienestar de los empleados y mejora su rendimiento laboral, los directivos seguían penalizando a los empleados que adoptaban estos comportamientos cuando optaban a un ascenso o estaban siendo considerados para un nuevo puesto. Basándose en sus conclusiones, los investigadores ofrecen sugerencias para ayudar a las empresas a crear políticas y construir una cultura que proteja los límites de los trabajadores, evite el agotamiento y recompense el trabajo fuerte.