Innovación sobre la marcha

Innovación sobre la marcha


El origen de la frase «innovar o morir» es motivo de controversia. Peter Drucker lo declaró famosamente, aunque otros pueden haber compartido sus monedas. Pero sea cual sea su génesis, el sentimiento ahora está muy extendido: manténgase por delante del ritmo del cambio o brindis.

Por supuesto, no todas las empresas tienen los recursos o el tiempo para desarrollar un laboratorio de I+D para probar y desarrollar la próxima gran novedad. (Si tu empresa lo hace tener los recursos o el tiempo, querrás leer esto.) Sin embargo, todas las empresas sienten la necesidad de adaptar su estrategia y su combinación de productos tan eficazmente como, por ejemplo, un gigante como Procter & Gamble. Entonces, ¿qué van a hacer las empresas? Abordamos este tema en el foco de atención de este mes: «Innovación sobre la marcha».

En el artículo principal, un trío de autores de la consultora Innosight (Scott Anthony, David Duncan y Pontus Siren) argumentos para crear lo que denominan un «sistema de innovación mínimo viable» dentro de su organización en tan solo 90 días. Requiere poca inversión y ninguna contratación y, según los autores, le permitirá hacer que «la magia de la innovación» sea más sistemática y estratégica.

También en el punto de mira, Stefan Thomke, de Harvard Business School, y Jim Manzi, fundador y presidente de Applied Predictive Technologies, abordan la cuestión de cómo probar nuevas ideas. Ponemos demasiado énfasis en la intuición, encuentran, y no lo suficiente en el conocimiento. Así como una empresa farmacéutica realiza experimentos basados en protocolos científicos establecidos antes de introducir un medicamento, cualquier otra empresa debe emplear rigor al desarrollar un nuevo modelo de negocio. Realice las pruebas correctamente, sostienen los autores, y podrá saber si un nuevo enfoque tendrá éxito.

En un tercer artículo, Nathan Furr y Jeff Dyer, un par de profesores de negocios de Brigham Young, detallan el tipo de liderazgo necesario para llevar a un equipo «hacia lo desconocido». El proceso seguramente va a ser irregular, pero ese es el punto. La ventaja sostenible, dicen, no proviene de la superioridad de ningún invento en particular, sino de la capacidad de los líderes de «fomentar una organización que pueda aprender de los errores de forma más rápida, eficiente y coherente que la competencia».

¡Así que sal y comete errores!

Escrito por Adi Ignatius